Restaurante Casa Bassa

El proyecto se compone por un Boutique Hotel de 24 habitaciones y un restaurante gastronómico en planta baja ubicado en la ciudad de Valencia.

VALENCIA COMO PUNTO DE PARTIDA

El concepto de interiorismo, en este caso, lo imaginamos en consonancia con el entorno marítimo y su situación local, tomando como eje central Valencia. En cuanto a la elección de materiales, se ha optado por elementos naturales que podemos ver en el litoral del mediterráneo y concretamente en la capital de la Comunidad Valenciana. Se ha llevado a cabo una intervención completa. Empezando por una zonificación arquitectónica de espacios, el tratamiento de todas las fachadas y posteriormente el diseño interior de restaurante y hotel. El objetivo era trasladar la visión artística y contemporánea de un espacio mediterráneo a través de la utilización de materiales, colores y texturas naturales y frescos. Para ello, se parte de una división del espacio mediante los grandes arcos pintados en blanco.

Estos apoyan sobre una zona central destinada a armarios, alicatada en el tono verde elegido como uno de los colores predominantes en la paleta principal. Si bien es cierto que no existe una separación por zonas, sí que se buscó crear ambientes en los que el comensal tuviera su espacio y se sintiera cómodo. Otro de los aspectos característicos de este proyecto, es su ubicación.

El restaurante se encuentra en primera línea de mar y conecta con el paseo marítimo de Valencia. Sin lugar a duda, esto era un factor que debía ser potenciado, por lo que se buscó la forma de conectar la terraza del restaurante con el interior del mismo. Todo el proyecto se articula mediante la utilización de alicatados, estucos, dameros y maderas al natural. Todos ellos materiales propios de la zona y de la arquitectura típica valenciana.

En cuanto a la elección de la iluminación, se ha optado por lámparas con materiales naturales que a su vez aporten volumen y movimiento al espacio. Algunas de ellas diseñadas y fabricadas en exclusiva para el proyecto. La paleta de colores está inspirado en la costa mediterránea. Queríamos un color singular que huyera del habitual azul, por lo que optamos por un verde botella. Combinado a su vez con diferentes tonalidades de blanco y con caldero oscuro.

Otro de los elementos a destacar y que son representativos de este restaurante son los grandes platos elaborados ad hoc para el proyecto. Estas obras de arte están inspiradas y evocan al mar mediterráneo. Cada pieza cuenta con un metro y medio de diámetro y están ubicadas sobre una estructura de listones de madera. Se optó por este recurso porque queríamos un elemento que fuera representativo y, además, es propio de la Comunidad Valenciana colgar platos como obra de arte y parte de la decoración de las viviendas. No obstante, se decidió ir más allá y darle una vuelta más al concepto reescalándolo y personalizándolo con motivos del fondo marino.